Los Passano, familia italiana residida en Puno trajo por primera vez el sombrero borsalino
Reseña Juan Passano, que el sombrero fue hecho en la célebre fábrica de sombreros "Borsalino" en Italia.

La introducción del sombrero «Borsalino» es materia de controversia, pues se pone en duda donde lo adoptó primero, sin embargo, los testimonios dan fe que la ciudad de Puno fue donde se presentó por primera vez, tal como lo señala Juan Pasano (descendiente de italianos) en una reseña.
Su abuelo del mismo nombre (Juan Passano) viajó a Italia en 1922 a matricular a sus tíos mayores en el Liceo franciscano de Rapallo bajo el régimen de internado, como casi todos los hijos de puneños; y también visitó varias ciudades celebrando contratos de compra-venta, como los célebres productos Motta y bicicletas Bianchi en Milán.
En la ciudad de Parma para sus célebres quesos y en Perugia para los finos chocolates y bombones. En Turín firmó en contrato exclusivo para los automóviles Fiat, lo mismo que visitando la fábrica de sombreros Borsalino en Alessandria, a donde llevó una muestra de las prendas usadas por las mujeres del altiplano peruano.
El resultado fue un sombrero de insuperable calidad confeccionada en “piel belga de conejo” que era el pelo prensado y adornado con hermosos filetes de seda y elegantes broches, logrando ser el distribuidor exclusivo de este nuevo tipo de sombrerito a toda la población aymara en ambos lados de la frontera de Perú y Bolivia.
El éxito fue inmediato y no sólo se extendió al altiplano, sino también a Bolivia y el norte de Chile.